domingo, octubre 6, 2024
Nacionales

Rumbo al 8M

Estas son las palabras mediante las cuales Rita Segato nos convoca a un nuevo encuentro de mujeres que se llevará a cabo a nivel mundial el día 8 de marzo como ocurre hace años. Las mujeres nos juntamos, marchamos, denunciamos y nos unimos en un grito por nuestros derechos, por la igualdad de espacios, oportunidades y salarios, por el reconocimiento de nuestro trabajo y por la abolición de este modelo patriarcal por el cual estamos atravesados/as que nos somete y arrasa con nuestras vidas mediante la violencia machista instaurada que es su herramienta.

“Pienso que estamos frente a una refundación del feminismo llevando consigo todo el pasado de todas las luchas de todas las mujeres en todos los lugares, pero en un nuevo momento, un momento en donde todas las políticas de matriz masculina que tiene en ADN masculino, el ADN de las historia de los hombres han fracasado. Se nos entrega una nueva era de la política donde y creo que con todas nuestras diferencias, es un momento donde la gran cantidad de feminismos se va a ver las caras y eso es fundamental, vernos todas las caras en la calle. El lado pluralista es nuestro lado, entonces entre todas vamos a pensar cómo es un modo femenino de hacer política, a eso llamo refundación del movimiento feminista”, reflexiona Rita Segato.

Marchamos por la igualdad de salarios, cargos, cupos laborales. Denunciamos porque estamos hartas de ser maltratadas y hostigadas por nuestra ropa, por nuestra manera de actuar, de hablar, de pensar, de ser o por la cantidad de tipos que metemos en nuestras camas. Nos movemos para evidenciar que nuestros cuerpos siguen siendo oprimidos, abusamos y acosados por el machismo en el que estamos inmersos que nos juzga y castiga por ser mujeres.

Es esencia comprender qué exigimos nosotras, las mujeres, durante las asambleas realizadas, los encuentros, los talleres, las marchas y en especial en la del 8 M cada año a nivel mundial. Necesitamos como colectivo y de manera individual ser escuchadas, miradas y cuidadas. Tanto el Estado como la sociedad deben respetar de nuestros derechos y ser garantes de los mismos. Los femicidios, acosos y abusos ocurridos en manos de la violencia machista hoy parecen ser una epidemia y el Estado debe y tiene que velar por nuestra salud como ciudadanas mediante capacitaciones, dispositivos, educación, formación, programas que nos alojen y espacios a donde poder acudir en una situación de desamparo.

Reclamamos la ley de la Interrupción Voluntaria del Embarazo (ILE) para que no sigamos muriendo, proclamamos la aplicación (obligatoria) de la Educación Sexual Integral (ESI) en las escuelas para prevenir y educar. Estamos urgidas como grupalidad de re pensar y modificar este modelo patriarcal en el que vivimos donde el hombre parece ser el amo y señor de nuestros cuerpos disponiendo de ellos a su antojo.

Defendemos un feminismo pluralista.  Pensamos en una refundación del feminismo como una forma feminista de hacer política.

Marchamos por la igualdad de salarios, cargos, cupos laborales. Denunciamos porque estamos hartas de ser maltratadas y hostigadas por nuestra ropa, por nuestra manera de actuar, de hablar, de pensar, de ser o por la cantidad de tipos que metemos en nuestras camas. Nos movemos para evidenciar que nuestros cuerpos siguen siendo oprimidos, abusamos y acosados por el machismo en el que estamos inmersos que nos juzga y castiga por ser mujeres.

Defendemos un feminismo pluralista.  Pensamos en una refundación del feminismo como una forma feminista de hacer política. La lucha es en todos los frentes y como dice Segato: “Ningún Patriarcado hará la Revolución”.

No podemos bajar los brazos ni dejarnos vencer, este movimiento, este colectivo, este conjunto de subjetividades que crece día a día debe seguir proclamando, luchando y reclamando por sus derechos porque, como menciona Segato, la conquista del poder es un proceso que nunca culminó.

“Más que colonialidad del poder, deberíamos de hablar de conquistualidad del poder, porque la conquista me he dado cuenta es un proceso que nunca terminó, que no se cerró, es un proceso en curso, la toma de territorios, el desalojo, la rapiña”, advierte Rita Segato.

Carla Elena. Psicóloga Social, miembro de Forum Infancias. Docente.

NOTAS RELACIONADAS

Violencia machista y femicidios: “Nos están matando”

La ola verde vino para quedarse y teñirlo todo a su paso

Abuso. Trabajar el padecimiento y la huella

Hoy todas somos una

Hay secretos que es mejor no guardarlos