jueves, octubre 3, 2024
Nacionales

Construyamos memoria porque los 30 mil somos todos y todas

“Le diré que frente al desaparecido en tanto éste como tal, es una incógnita, mientras sea desaparecido no puede tener tratamiento especial, porque no tiene entidad. No está muerto ni vivo…está desaparecido”, estas fueron las palabras pronunciadas en 1979 por el dictador Jorge Rafael Videla, en una conferencia de prensa, cuando le preguntaron por los dichos del Papa sobre los desaparecidos y detenidos sin proceso. Videla es, sin dudas, uno de los seres más cínicos de nuestra historia y su frase que quedará en nuestra memoria por siempre.

Es preciso recordar cada 24 de marzo el aniversario de ese golpe de Estado que nos dejó heridas, lesiones, angustias, vacíos y 30.000 seres desaparecidos. Pero la tristeza por nuestra historia se transita y es por eso que, como pueblo, tenemos la capacidad de unir nuestras subjetividades, nuestros pañuelos blancos, para seguir denunciando, marchando, reclamando y pidiendo justicia por nuestros nietos, hijos y hermanos desaparecidos y, de este modo, intentar reparar tanto dolor y horror.

En tal sentido y debido a la cotidianidad que hoy atravesamos a causa del Covid 19, los Organismos de Derechos Humanos pronunciaron que el miércoles 24, Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, la histórica movilización a Plaza de Mayo será reemplazada por acciones conmemorativas de menor escala, pero con similar objetivo: “Recordamos a las y los 30.000 detenidos-desaparecidos por el terrorismo de Estado, reivindicamos sus luchas y repudiamos los delitos de lesa humanidad cometidos por los genocidas”.

Una de las actividades propuestas por la organización Abuelas de Plaza de Mayo es el plantado de 30.000 árboles (en macetas, jardines, canteros) conmemorando las almas desaparecidas en los años ‘70. En tal sentido, lanzaron la iniciativa y sugieren a los participantes, que el 24 suban a sus redes sociales la acción realizada, etiquetando a los diferentes organismos de Derechos Humanos de cada localidad.

Desde la Secretaría de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia han pedido a la población que a  “#45AñosDelGolpeGenocida este año no marchamos a Plaza de Mayo por la emergencia sanitaria, pero manteniendo viva la memoria de los #30mil a través de acciones colectivas para gritar juntos #NuncaMás”.

Hace unos días la misma Secretaría puso en marcha La campaña “Memoria es futuro”, organizada por el Archivo Nacional de la Memoria que tiene como objetivo recibir donaciones de materiales documentales vinculados a la última dictadura cívico-militar con el fin de preservarlos y ponerlos a disposición de consultas.

Fuente: Sito oficial “Abuealas de Plaza de Mayo”.

En este sentido los clubes River Plate y Boca Juniors lanzaron una convocatoria destinada a familiares de personas desaparecidas durante la última dictadura cívico- militar en Argentina con la finalidad de conocer las historias de vida y reivindicar su condición societaria. Proponen a quienes tengan información para aportar, se contacten con el River Plate (historia@cariverplate.com.ar) y Boca Juniors (derechoshumanos@bocajuniors.com.ar). Lo propio hicieron Racing Club, Banfield y Argentinos Juniors, entre otras entidades.

Porque sin memoria no hay construcción posible, es parte de nuestro futuro, nos permite forjar un relato: no debemos ni podemos olvidar como sujetos sociales ni como Estado.

Porque son 30.000 los desaparecidos, 30.000 los crímenes de lesa humanidad, 30.000 las heridas que dejaron huellas guardadas en muestras memorias para que cada día, cada encuentro, cada jueves, cada 24 de marzo, cada nieto recuperado nos muestre y demuestre que Nunca Más queremos una dictadura militar en nuestro país.

Porque la memoria, el recuerdo y el trabajo cotidiano son los que nos mantienen vivos/as es que debemos, como sujetos sociales, educar, relatar, denunciar y seguir reclamando por los derechos que nos quitaron; a decir, a hablar, a transitar, a defender, a manifestar, a pensar diferente. A ser. Recuperar a nuestros nietos y saber el paradero es un camino que las organizaciones sociales en conjunto con el Estado están realizando día a día para de esta manera ayudar a forjar la historia de nuestro país que tanto necesita recuperar.

Porque los derechos son humanos, éticos, morales y no tienen que estar pagados ni asegurados ni garantizados con sangre. Porque no queremos más a estos sujetos, asesinos, genocidas, que secuestraron y desaparecieron a nuestros compañeros, hijos, padres y nietos. Porque queremos a las abuelas y madres trabajando, estudiando, educando y criando a sus hijos y nietos, no marchando alrededor de una plaza desesperadas por saber algo de sus familiares sin tener respuestas más que agresiones, golpes y malos tratos.

Porque la historia es lo que nos conforma, nunca olvidemos a esas mujeres, valientes, desesperadas nos enseñaron y mostraron lo que es la lucha, la tenacidad y la esperanza. Porque para poder tener un presente y un futuro diferentes es imprescindible entrelazarlos con nuestro pasado.

Fuente: Sitio oficial “Abuelas de Plaza de Mayo”

El filósofo francés Gilles Deleuze escribió: “La tristeza, los afectos tristes son todos aquellos que disminuyen nuestra potencia de obrar. Y los poderes establecidos necesitan de ellos para convertirnos en sus esclavos. Los poderes tienen más necesidad de angustiarnos que de reprimirnos. No es fácil ser un hombre libre: huir de la peste, organizar encuentros, aumentar la capacidad de actuación, afectarse de alegría, multiplicar los afectos que expresan o desarrollan un máximo de afirmación. Convertir el cuerpo en una fuerza que no se reduzca al organismo, convertir el pensamiento en una fuerza que no se reduzca a la conciencia”.

Carla Elena. Psicóloga Social. Diplomada en “Violencia Familiar y Género”. “Derecho de Niñez y Adolescencia”. “Discapacidad”. Posgraduada en “Educación Sexual Integral: Desafíos de la implementación en el ámbito educativo y comunitario”. “Despatologización de las Diferencias”. Miembro de Forum Infancias. Docente. @Carla_DFederica. Instagram: carlaelena5.

Imagen de portada: la autora es Laura Jaite, integrante del Forum Infancias.