En medio de denuncias, renunció el jefe de la Policía de la Ciudad, Carlos Kevorkian
Por Juan Agustín Maraggi/El Furgón –
El viernes, el jefe de la Policía de la Ciudad Carlos Kervorkian, presentó su renuncia ante el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, rodeado de denuncias por sus antecedentes en las fuerzas.
Dos días faltaron para que Carlos Kervorkian cumpliera seis meses en su rol. Había sido designado como Jefe de la Policia de la Ciudad -fusión entre la Metropolitana y Federal – el veinte de febrero pasado en un acto que encabezó Horacio Rodríguez Larreta.
[AHORA] El Jefe de la @Policia_ciudad, Carlos Kevorkian, presentó su renuncia indeclinable al cargo. La conducción quedará a cargo del Secretario de Seguridad Marcelo D’Alessandro y el actual Subjefe Gabriel Berard.
— SeguridadBA (@SeguridadBA) August 17, 2018
Kevorkian fundamentó su renuncia en motivos personales, justo cuando los legisladores del Frente de Izquierda y organizaciones de Derechos Humanos avanzaban en exigir conocer el rol que cumplió en las fuerzas entre los años ’70 y ’83.
El prontuario de Carlos Arturo Kevorkian tiene larga data, las paradojas de la historia lo llevaron a graduarse en 1970 en la Escuela “Coronel Ramón L. Falcón”. Estuvo en funciones en la Policía Federal Argentina durante la dictadura de Lanusse y la genocida del ’76. Los lazos de esta fuerza con la Triple A (Alianza Anticomunista Argentina) son de público conocimiento y constan de amplia demostración. Sin embargo, su presentación en la web oficial de la Policía de la Ciudad omiten qué actividad realizó durante esa época.
El ex-jefe de la Policía era cercano al ‘Fino’ Palacios y en su prontuario se encuentra el operativo de seguridad durante un encuentro por la Primera B Metropolitana entre Chacarita y Defensores de Belgrano, en 2005, cuando falleció Facundo Blanco. Durante aquél partido, efectivos de civil se infiltraron en las gradas. La policía reprimió ferozmente y Facundo falleció dos días después a causa de los golpes que recibió. “Te hago cagar a palos. ¿cuál es el problema?” fue la frase que inmortalizó a Kevorkian en esa fecha.
Su renuncia, casualmente, se da en paralelo de una exigencia de los legisladores Patricio Del Corro y Myriam Bregman para acceder a informes que den cuenta de su rol durante los años en que las dictaduras o la Triple A funcionaban. La suposición es que la falta de antecedentes en su currículum no es casualidad.
En 2009 Kevorkian pasó a ser Coordinador General de la Policía Metropolitana, siendo el encargado de su fundación y organización. La fuerza, desde su inició, se vio envuelta en polémicas, treinta y ocho de los miembros de su cúpula fueron denunciados por ser partícipes en la dictadura genocida, además de romper un récord: dos casos de gatillo fácil en su haber por mes.
Llegó al cargo luego de la polémica salida de José Potocar –a quien segundeaba– imputado por asociación ilícita por pedir coimas y arreglos con comerciantes y trapitos en los barrios de Saavedra y Nuñez. A su vez, fue uno de los que se encargó de la represión durante los debates por la Reforma Previsional en el Congreso Nacional.
En junio, el Jefe de Gabinete de la Ciudad de Buenos Aires Felipe Miguel, declaró en la legislatura porteña que no existían policías con pasado en la dictadura–al menos, no denunciados–. Unos días después, Esteban Sanguinetti que se desempeñaba como subinspector, fue detenido por el asesinato de tres militantes en el año 1977 en el barrio de Caballito. Su renuncia, ante el pedido de informes, no parece casualidad.
Los vínculos del macrismo con policías, militares y civiles que actuaron en la dictadura no es una novedad, el caso de Julio Cirino–que se encargó de la sección internacional de la fundación PensAR del PRO hasta ser detenido por delitos de lesa humanidad–, Pedro Florido y Federico Young son sólo algunos casos de una larga lista.