Las mujeres alertas
Agustina Lanza/El Furgón – Hace una semana, tres amigas pararon un taxi después de salir de un boliche en Costa Salguero. Eran casi las seis de la mañana. Indicaron un primer destino que se modificó un par de veces durante el trayecto. Una de las chicas se dio cuenta que el taxista hablaba con alguien por whatsapp y enviaba las coordenadas de las direcciones que le decían. Ese contacto devolvía otra ubicación en busca de un punto de encuentro. Para ese entonces, ellas se habían dado cuenta de la situación: se mandaban mensajes a sus celulares para estar alertas a los próximos movimientos del hombre que las llevaba. En medio del viaje, el taxi frenó en una esquina e intercambió parpadeos de luces con una combi que estaba a pocos metros. Una abrió la puerta y se tiró. Las otras la siguieron. El contador marcó los 300 pesos que nadie pagaría. Las chicas corrieron a toda velocidad por la calle mientras los vehículos escapaban.
Esta historia la contaron las mismas protagonistas en Facebook después de denunciar el hecho a la policía. El posteo lo titularon “Nos llevaban” y fue compartido casi 45 mil veces. Forma parte de una lista de intentos de secuestro que se replicaron en el último mes. Los hechos tienen características similares: mujeres de entre 13 y 25 años son perseguidas por autos o camionetas y entre varios hombres intentan llevárselas por la fuerza.
Apenas comenzó abril, dos chicas que vivían en el partido de San Martín, cerca de la casa de Araceli Fulles, contaron en las redes sociales que fueron interceptadas por una Trafic blanca en distintos horarios. Las dos pudieron zafarse y una de ellas subió fotos de la denuncia que había hecho en la comisaría. Cuando Araceli todavía estaba desaparecida, la familia no descartaba que ella podía haber sido víctima de un secuestro y la investigación viró hacia la hipótesis de la trata de personas. Hasta buscaron la intervención de una fiscalía especializada.
En los barrios
Los casos fueron replicándose en Capital Federal y en el Conurbano con el correr de los días. En Villa Crespo, los policías de la comisaría 27° buscan a una camioneta con la patente MQS 512. La pudieron identificar tres jóvenes distintas, todas menores de 18 años. Una de ellas -D, de 13 años-, contó que le sacaron fotos y que un hombre se bajó del vehículo para seguirla un par de cuadras. Pero ella buscó ayuda en un negocio y lo perdió de vista. “Por suerte es una nena atenta y pudo actuar rápido”, dijo Julieta, hermana de D, a El Furgón.
Aquellos episodios fueron de día, al igual que el del barrio El Rocío, en Florencio Varela. A, de 15 años, fue testigo de cómo se llevaban a una chica rubia con buzo rojo y pantalón negro a pocos pasos de su escuela. “Le pusieron un trapo blanco en la boca y la subieron al auto. Después se bajó un hombre gordo de casi 45 años y gritó ‘a ella también’, diciéndolo por mí. Ni lo dudé, corrí sin parar hasta el colegio”, relató la joven en un texto que se hizo viral. Su mamá efectuó la denuncia que quedó radicada en la comisaría 4° de esa localidad.
Los vecinos de Quilmes y Berazategui contabilizaron nueve casos con el mismo modus operandi y hablaron de “zonas liberadas para la trata”; en estos días convocaron a asambleas y pidieron una reunión con las autoridades. En Villa Pueyrredón se reunieron frente a la comisaría 47°. Lo mismo en Monte Castro: los vecinos llamaron a concentrar el 3 de mayo en las calles Bermúdez y Álvarez Jonte, a raíz de un intento de secuestro a dos adolescentes que volvían de la escuela a las dos de la tarde.
La Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) aseguró en un informe del año pasado que el 54 por ciento de las personas perdidas en el país son mujeres. En Argentina se buscan 3.228 niñas, adolescentes y mujeres adultas que faltan en sus casas. Dentro las posibles causantes de las desapariciones se mencionaron casos de explotación sexual prostibularia y asesinatos en los cuales los femicidas se apropian del cuerpo de sus víctimas.
En las redes
La semana pasada, el canal de televisión América mencionó el caso de una chica que caminaba por la calle y fue alcanzada por un auto negro en la localidad bonaerense de San Miguel. Hasta se mostró el video de la cámara de seguridad que lo probaba. Pero los testimonios de las víctimas circulan con más fuerza por las redes sociales. “Los medios no están haciendo eco de un rumor. Son denuncias concretas que llegan en otro formato y dan cuenta de lo que está pasando en la sociedad: una situación real de mucha agresión y violencia de género”, dijo a El Furgón Sandra Chaher, periodista y presidenta de la Asociación Comunicación por la Igualdad.
Ante la ausencia del Estado, las mujeres se unen y se ayudan entre ellas. Laura Amarilla, una usuaria de Twitter, tomó la iniciativa de crear una encuesta para generar estadísticas y un mapa acerca de los casos de intentos de secuestro. Además, se crearon nuevos grupos que buscan ser organizaciones como “Mujeres Armadas”, integrado por fotógrafas, periodistas, diseñadoras, profesoras que se ofrecen a dar charlas de educación sexual, entre otras.
Según un informe de las MuMaLá (Mujeres de la Matria Latinoamericana), ya son 111 los femicidios en lo que va del año. En la calle el temor y las sospechas parecen inevitables. Se puede ver en los descargos que hacen las mujeres en sus perfiles privados o públicos. A pesar de esas palabras desalentadoras, no se rinden. Ya no están más solas.
Si fuiste víctima de un intento de secuestro completá el formulario haciendo click aquí
Qué hacer cuando desaparece una persona
1- Hacer la denuncia. No hay que esperar 48 horas (ninguna ley lo especifica). Se puede realizar en la comisaría, en la fiscalía y en el Juzgado. También llamando al 145 (Línea gratuita las 24 horas) o al 0-800-555-5065 (Ministerio de Seguridad de la Nación)
2- Pedir que la denuncia sea caratulada como “medida de protección” y no como “fuga de hogar” ni “averiguación de paradero”.
3- Pedir que carguen la denuncia al SIFCOP (Sistema Federal de Comunicaciones Federales) a fin de que se activen las alertas en frontera. Y llamar al 0800 para corroborar la hayan cargado.
4- Pedir copia de la denuncia, identificación de quién la toma y pedir número y tipo de organismo que va a intervenir.
5- Información que hay que aportar: descripción física de la persona desaparecida (aspecto, edad, la ropa que vestía) y la fecha y lugar en que se la vio por última vez. Llevar la foto más reciente que se tenga de la persona que se busca. También informar sobre los vínculos cercanos de la víctima, su rutina, si tiene tarjetas de crédito, si usa tarjetas de transporte y todo aquello que permita hacer un seguimiento de sus posibles movimientos.
6- Si la Policía Federal o cualquier otra fuerza de seguridad no toma la denuncia, comunicarse al 0-800-555-5065 de Consultas y Denuncias del Ministerio de Seguridad de la Nación.
7- Activar otros canales informales: armar una red dentro del ámbito de la persona desaparecida y usar las redes sociales.